Andamios y grandes coporaciones S.A.

Hace unos días, en plan coña, Nacho me pasó esta imagen:

La verdad es que estuvimos echándonos unas buenas risas con ella. En la imagen se ve a unos trabajadores de la construcción, presumiblemente del Magreb, dándole al ladrillo sobre una estructura poco segura y hecha sobre la marcha, al tun tun. Un bidón aquí, una tabla por acá, métele unos ladrillos para calzar mejor y así, hasta llegar a la segunda planta del edificio y, de paso ya que estamos, aprovechamos la baranda de la terraza para estabilizar.

El caso es que después la conversación se fue desviando y acabamos utilizando la imagen como metáfora de funcionamiento de una gran corporación. Y la verdad es que funciona!

Quién, que no haya trabajado en una de las grandes, no se ha encontrado con estos comentarios?

“Se trata de un proyecto de dos meses, pero no tenemos tanto tiempo. Haced lo que podáis en una semana y ya está, de acuerdo?”

“Bueno, para hacerlo bien bien tendríamos que hacerlo como proponeis. Pero, de verdad, tampoco hace falta que lo hagáis tan bien. En realidad es casi un lavado de cara…”

“No, no, no. Ya sabemos lo que quieren los usuarios. Lo que hace falta es aplicarle el concepto de diseño que corresponda. Ya está. No hacen falta test de usuarios y los requisitos los tenéis aquí encima”.

– Big boss hablando: “Yo lo que quiero que aparezca en todas las páginas es este elemento. Es fundamental para unificar nuestra imagen global hacia el exterior. Considerando ésto podemos avanzar con el diseño. En dos días lo podemos tener”.

Y así, lo que al principio, como en la foto, tenía pinta de ser algo chulo, sólido y decente, acaba convirtiéndose en una chapuza de órdago, con mil vericuetos, otras tantas excepciones, que ha costado una pasta tremenda, discusiones terribles, noches sin dormir y, para colmo, acabará acumulando polvo sin implementarse…

Como colofón, sufrido en mis propias carnes, en una gran corporación de éstas que menciono, tras haber acabado un proyecto de esta índole y bastantes meses después, nos llamó el responsable de implementación para (atenzione sinori) preguntarnos que qué era éso de un png…

Y lo peor de todo es que andamios de este tipo campan tranquilamente a lo largo y ancho de las aceras de nuestro soleado país…

Pánico me da recordar esos días!