Dedos y wearables

Más allá de la cuestionada utilidad de estos dispositivos, si hay algo que me llamó la atención del iWatch en su lanzamiento oficial fue la ausencia de dedos, de interacciones reales entre las manos humanas y el dispositivo en cuestión.

Si te das una vuelta por los vídeos oficiales de otros productos de Apple, como el del iPhone 6, enseguida empiezas a ver dedos toqueteando el dispositivo, a gente usándolo en situaciones reales. El iWatch, por el contrario, flota siempre sobre un fondo blanco, sin más.

Creo que la decisión de prescindir de los dedos pone encima de la mesa la principal desventaja de este tipo de dispositivos: la escasa dimensión de su pantalla que hace ridícula su interacción con los dedos y que, casi de forma obligada, lleva a enfocarlo como un aparato de consulta, con interacciones muy básicas.

Para que tu mismo lo compruebes: Vídeo oficial del iWatch y el vídeo oficial del iPhone 6.