I love selling. But I’ve always been suspicious of marketing, at least the way it seems to be practiced by most companies. It seems to me that a lot of marketing is often deployed to cover up a product’s deficiencies rather than point out what makes it great, to confuse as much as to illuminate.
Jason Fried · Co-fundador de Basecamp
Hacía tiempo que andaba buscando un motivo que me animara a escribir sobre este asunto – pelín sensible – y este viejo artículo de Fried me lo ha puesto a tiro.
Siempre he/hemos sido partidario del “no-marketing”, de hacer el ruido justo sobre lo tu producto o servicio de una manera natural y orgánica. De escaso bombo y platillo.
Personalmente creo que el mejor marketing es el resultado precisamente de invertir poco o nada en esa palabra, aquel que se genera “simplemente” con el boca a boca, el que se genera de manera honesta y natural tras un servicio o un producto bien hecho. Con una buena experiencia de principio a fin. El “simplemente” lo pongo entre comillas porque no es tan simple como parece.
Por eso suspiro cuando leo tanto parole en blogs, actualizaciones de Twitter y publicidad en resultados de búsqueda, porque lo único que persiguen – como bien señala Fried – es “confundir” al usuario incauto para que saque su tarjeta. Recogiendo peras del famoso long tail.
Hablando de este tema con Isabel Inés, sí que es cierto que en numerosas ocasiones el objetivo no es ni natural ni orgánico. Cuando empiezas a necesitar aumentar la masa crítica de usuarios un 20% al mes (por poner un ejemplo cualquiera), en el lateral de tu sombrero empieza a leerse la palabra Marketing.
También es cierto que esta filosofía puede parecer más válida para servicios como formación o consultoría y menos para productos. Pero el propio producto de Fried tira por tierra esta forma de pensar: Basecamp.
En Basecamp, en lugar de centrar sus esfuerzos en atraer nuevos usuarios, pusieron toda su energía y recursos en ayudar a los ya existentes para mejorarles lo que tenían (también decidieron dejar de parecer cools frente a los medios de comunicación, por cierto).
El resultado muchos de vosotros lo conoceréis: una herramienta de gestión de proyectos simplemente brillante, usada por miles de usuarios y sin aceptar inversión externa (tan sólo una “contribución de Jeff Bezos”).
Volviendo a la Tierra, y evitando cualquier tipo de comparación, en esta casa (Seisdeagosto.com) nunca se ha puesto un duro en marketing, como tampoco lo hemos hecho en Ilios.org, ni en Lanavenodriza.com (todavía hay gente que no se acaba de creer que no tenemos equipo comercial, por cierto).
A lo mejor estamos equivocados y deberíamos rascarnos el bolsillo y empezar a mover la manivela del Marketing y seguir creciendo y creciendo. Pero lo cierto es que bajo esta filosofía nos va la mar de bien. Y de paso somos bastante felices, que también es importante.
No lo había leído. Muy bueno.
En España tienes que unirle al planteamiento de "áreas", un acelerador que hace que la cosa sea aún peor: muchas de los planteamientos de marketing no son profesionales. Simplemente, alguien desde negocio quiere "crecer".
Siempre escuche que el marketing es humo