“This is broken” fue un blog creado por Mark Hurst allá por el 2003. En él, usuarios de todo el planeta compartían ejemplos cotidianos de productos mal planteados o que simplemente no funcionaban (la mayoría tecnológicos). La iniciativa cerró en 2007.
Para mi era un sitio de visita obligada en aquellos años, especialmente cuando tenía frente a mi proyectos de especial tensión. No sé por qué pero, paseándome por los ejemplos, me ayudaba a quitarle estrés al proyecto, a verlo todo desde otro prisma. Pensar en lo perecedera, frágil y caduca que era (y es) la tecnología, me ayudaba a relativizar todo el trabajo que tenía por delante y a estar más seguro de lo que hacía.
En un mundo donde los teasers futuristas con conceptos brillantes nos acercan un futuro perfecto, con robots casi humanos, coches increíbles y artilugios perfectos, no viene mal pasar por este baño de humildad y recordar que, por mucho que nos empeñemos en diseñar ese futuro perfecto, la realidad siempre tendrá a mano su varita mágica para romper lo que se le cruce por su camino.
Así ocurría hace 15 años y así seguirá ocurriendo, irremediablemente.
P.D.: ¿Os ha funcionado alguna vez el botón del doble cero en un cajero?